Consejos de la Medicina Oriental para la Primavera

Llegó la primavera y con ella mis consejos de la Medicina Oriental.

Según la mirada oriental, la primavera es el comienzo del año.
El cuerpo que estaba hibernando, sale de la cueva, las plantas crecen y necesitan de un espacio amplio para que nada detenga su crecimiento.

Esto quiere decir que necesitamos vestir ropa cómoda, que no ajuste ni apriete, porque tener la cintura, tobillos o alguna parte del cuerpo apretado, podría bloquear el cuerpo energéticamente. Incluso mejor no atarse el cabello.

A su vez la primavera es la época de limpiar y depurar las toxinas que hemos acumulado durante el invierno. Si no has pasado adecuadamente el invierno, podrían aparecer problemas de piel, insomnio, mucosidad, estreñimiento, sensación de cuerpo pesado, somnolencia, cansancio, depresión, entre otros.

Otro fenómeno típico de la primavera son los cambios bruscos de temperatura que desorientan nuestro cuerpo ya que invertimos mucha energía para adaptarnos al cambio.

Este tipo de variaciones climáticas estresa mucho el cuerpo y baja la inmunidad, es por eso que en esta época hay muchos resfriados, virus, alergias, etc…

La primavera activa la energía del meridiano del hígado y si esta no puede circular libremente, aparecen los síntomas

Compartimos contigo algunos consejos fáciles y rápidos de aplicar que te ayudarán a que vivas la primavera más livian@:

1) Mover el cuerpo

Para mover la energía del hígado es necesario mover el cuerpo ya que el ejercicio mejora la circulación de la sangre, sudamos y a través del sudor limpiamos el cuerpo (es un DETOX 😉!)

También liberamos estrés a través del movimiento. El deporte más adecuado en primavera sería andar, practicar yoga y estiramientos. Estirar la musculatura como si quisiera hacer crecer una planta.

El deporte muy fuerte que requiere demasiada intensidad no se considera muy adecuado en esta estación del año.

2) Alimentación

Como es la época de depuración buscaremos que la comida sea suave y que su sabor no sea fuerte, ni aceitoso para facilitar la limpieza corporal.

Es bueno comer verduras verdes porque ayudan al buen funcionamiento del hígado e incorporar poco sabor ácido y más sabor dulce. ¿Porque esto?

Porque el ácido pertenece al hígado, que en primavera se activa por si solo, por lo que sumar más ácido podría sobreexcitarlo y esto se vería reflejado en sensaciones de enfado, irritabilidad o inestabilidad emocional.

El dulce para la medicina oriental no es pastel, ni azúcar sino arroz, avena, mijo, maíz, boniato, calabaza, zanahoria entre otros.

A parte te ayudaría no tomar cafeína, teína, picante, alcohol, tabaco, dulces procesados y cualquier estimulantes.

3) Descanso

Cuando entramos en la primavera oscurece más tarde y amanece más temprano que en el invierno.

Nuestro cuerpo cuando más acorde con la naturaleza funciona mejor, justamente porque somos parte de la naturaleza.

Irse a dormir “más tarde” es acostarse antes de las 23 hs o a las 00:00 hs como máximo y nos despertaremos pronto para ayudar a expandir energía primaveral.

4) No enfriar el cuerpo (proteger el Yang)

Salimos del invierno y todavía el viento es frío, por eso es importante protegernos para conservar el calor corporal.

Te recomendamos tapar la garganta, la zona del vientre, lumbar, tobillos, los pies e ir quitando la ropa de los miembros superiores capa a capa.

5) Cuidar las emociones

El hígado controla las emociones. Dentro de lo que tú puedas, intenta no estresarte, ni ser negativ@ y procura no pensar demasiado. Si te cuesta parar la mente, revisa los puntos anteriores. Recuerda que meditar te ayudará a calmar la mente.

La primavera es la época en donde renacen las ilusiones, las ganas de hacer cosas y de estar más positivos.

Esperamos que la disfrutéis!

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